La Hermandad del Santísimo Nombre de Jesús y Nuestra Señora de la Esperanza tiene su sede canónica en el Convento de los Padres Dominicos de Santo Domingo, corazón espiritual de la Orden de Predicadores en América y uno de los lugares más emblemáticos de la historia eclesial del continente.

Este convento, fundado a inicios del siglo XVI, fue el primer centro de formación teológica y predicación misionera del Nuevo Mundo, hogar de figuras proféticas como Fray Pedro de Córdoba y Fray Antonio Montesino, cuyas voces marcaron el nacimiento de los derechos humanos en tierras americanas. Desde sus muros se proclamó por primera vez la dignidad inviolable de los pueblos originarios, y aún hoy sigue siendo un faro de fe, verdad y justicia.

Erigida canónicamente por decreto del Arzobispado de Santo Domingo, la Hermandad desarrolla su vida litúrgica, formativa y social en estrecha comunión con la comunidad dominica residente en este convento, con quienes compartimos misión, espiritualidad y servicio a los más necesitados.

La sede de nuestra Hermandad no es solo un templo histórico: es un lugar vivo, donde la fe se hace comunidad y la esperanza se anuncia con obras.